Eres un ejemplo para tu hijo

Si tienes un pequeño de dos años, sabrás lo que es contar con un espejo en miniatura porque a partir de esa edad, los niños pasan por un periodo en el que quieren imitar todo lo que hacen los adultos, en especial sus padres.

El niño replica lo que digan los padres, los gestos e incluso los estados de ánimo, así que debes estar muy pendiente a tu comportamiento.

¿Qué hacer?

Utiliza la imitación como una herramienta para el aprendizaje, así que es buena idea que te imite por ejemplo en tareas como la limpieza.

Refuerza las conductas que quieres que imite, repitiéndolas o haciéndolas con más frecuencia.

¿Qué no hacer?

 No hagas lo obligues a imitarte ni a ti ni a nadie. No lo compares con nadie.

  No utilices groserías o te expreses con gritos, no querrás que imite esto.

No desobedezcas normas delante de él, por ejemplo: cruzar un semáforo en rojo. Entenderá que las normas pueden ser desobedecidas y perderás autoridad.