Qué hacer cuando se cae o se da un golpe no grave

Cuando tenemos un/a niño/a debemos estar preparados para situaciones poco agradables o incluso algunos pequeños sustos, como por ejemplo pequeño golpes o heridas.

Es común que los/as niños/as se caigan, se golpeen o presenten ciertas heridas, pero lo más importante es que veas si se trata de una situación grave o no. En este caso vamos a tratar qué hacer cuando se trata de algo que no es grave.

¿Qué hacer?

Transmítele calma, dile que lo entiendes, que eso que le ha pasado duele pero que no se preocupe que todo estará bien.

Si se trata de golpes o moretones puedes aplicar hielo (metido en un trapo y quitándolo y poniéndolo para no quemarle la piel) o algún tipo de crema. 

Y si está acompañado de raspaduras o algún rasguño, entonces aplícale alguna crema o similar que sea para niños/as de su edad y que te haya recomendado tu médico para estas cosas.

¿Qué no hacer?

No te alarmes demasiado, si el niño está asustado y ve tu reacción de susto, eso empeorara la situación.

No exageres en los cuidados. Si se trata de un golpe que no es grave, no es necesario exagerar en los cuidados, porque le darás a pensar que realmente sí es algo grave.